una desterrada más de la muerte

jueves

Yo pensando en ti, tú... pensando en ella...


Sola en la ciudad, y me veo tan pequeña entre tanta gente que cae y busca su pieza en este rompecabezas, sin encontrar la clave para abrir el cofre del amor y descifrar las señales que ayuden a destruir esa soledad que las hace sentir tan sólo como una leve espuma en el desierto.
Por eso sigo aquí, sola y sintiéndome tan pequeña. La luna viajará hasta ti para contarte que sufro por tu ausencia, sollozará luz sobre tus pasos tratando de decirte que cada minuto aquí en mi habitación sigo amándote, odiándote y deseándote entre neurosis y sábanas que ahogan un cuerpo pequeño entre tanto mundo.
Oh! La esperanza, la esperanza de algo que nos suena a canción repetida, a palabra mal dicha. Un tren sin rieles, díscolo sin rumbo, sin cartas de amor, recuerdos olvidados, imágenes sin dueño y lágrimas saboreadas bajo el agrio dulzor de la melancolía.
Sé que llegará el día en que las velas se apaguen y acabe la agonía que me mantiene viva. Sé que llegará el día en que de verdad pueda reflejarme en alguien que me ame sin amaneceres incoloros, con soles ardientes y verdaderos, no sólo espejismos de deseo. O que también puede llegar el día en que pueda descansar de tanta mierda e irme de este lugar que no me ha pertenecido nunca, donde no encajé por más que quise.

Autor: tan sólo un alma en pena.

Stgo. 19 de enero de 2006 02:43 am